En dirección a La Meca

Entramos a una tienda buscando una fotocopiadora para fotocopiar, era medio dia y el lugar estaba desierto, habia sillones y muchas Shishas, el aroma del lugar era bien rico, olia a incienso con frutas, lo que se usa como "tabaco" para Sisha, un lugar típicamente adornado a lo oriental y como muchos otros negocios en Hamburgo, el dueño era musulman, un señor un tanto cara de piedra que habia visto antes, pero esta vez nos lo encontramos sobre sus rodillas y la frente al suelo a la par del mostrador. Nunca habia visto a un musulman orar, hacer el Azalá, la oración musulmana, nunca me habia interesado en que consiste, hasta ese momento. Lo vi pararse, inclinarse e hincarse de nuevo, y mientras esperaba a que nuestro asunto se resolviera, tuve la sensación extraña de ponerve a ver alrededor la decoración como un tonto, tratando de no ver al individuo en su acto, como no queriendo incluirlo en mi espacio visual, ignorando esa parte del paisaje, talvés para no importunarlo, pensé yo, pero al mismo tiempo pensé, que lo menos que ese individuo estaba pensado era en lo que estaba pasando a su alrededor; así que por alguna extraña razón me quite la gorra, porque habia alguien en oración a Dios, pensé. Leí que los musulmanes oran en dirección a La Meca.